Dra. Pilar Rojas

Psicoanalista
Médico especialista en Reumatología
Medicina de Familia y Enfermedades Psicosomáticas

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Menopausia

Para muchas mujeres la menopausia es una debacle, se sienten mal en un cuerpo que ya no es capaz de reproducirse, una época en la que se pone en juego esa dualidad presente en las mujeres de madre-mujer. Dos cuestiones diferentes pero que en muchas ocasiones aparecen unidas, indiferenciadas, porque una cosa es ser madre y otra muy diferente es ser mujer.

No resulta raro escuchar a mujeres que han llegado a esta etapa frases como “me he vuelto invisible” “ya no me miran los hombres como me miraban antes”, que nos muestran esta “pérdida de valor” que sienten. Pero aunque haya llegado a la edad de la menopausia a la mujer aún le quedan muchos años de vida, de una vida que puede ser plena. Nunca es tarde, dice la frase popular.

Si, como nos dice la poeta, el deseo no decae con la edad, podríamos pensar que quizás se concibe la sexualidad como inseparable de la reproducción, se pierde la vertiente de goce que tiene la sexualidad. La mujer llegada a la menopausia deja de poder reproducirse, pero no de gozar.

Freud señala que, paradójicamente y al contrario de lo que se piensa desde la Medicina, la menopausia se acompaña en la mujer de un aumento de la libido. Este aumento de la libido es, en ocasiones, mal tolerado por ella misma que, obedeciendo a los prejuicios circundantes, siente que “está mal” eso de que una mujer madura desee, goce, ame.

Más allá de los cambios fisiológicos que acontecen en esta época de la vida, gran parte de los síntomas físicos que se producen tendrían relación con este hecho, como los “famosos” sofocos.

Parece que el discurso médico obligara a la mujer en edad menopáusica a tener síntomas cuando, en realidad, no son obligatorios. Por ejemplo, se calcula que aproximadamente entre un 40-60% de las mujeres en esta etapa sufren síntomas locales relacionados con la atrofia vaginal que ocurre como consecuencia de la caída progresiva de estrógenos, algo característico de esta etapa de la vida de la mujer. De hecho, la sequedad vaginal, es uno de los motivos más frecuentes de consulta en Ginecología. Sin embargo la propia Medicina observa que las mujeres que se mantienen sexualmente activas a esta edad tienen menos atrofia y menos sequedad vaginal.

Poder hablar de las fantasías que acontecen y los prejuicios posibilita vivir esta etapa de manera plena.

Dra. Pilar Rojas

Psicoanalista
Médico especialista en Reumatología
Medicina de Familia y Enfermedades Psicosomáticas

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